domingo, 7 de abril de 2013

Me he dado cuenta poco a poco que he cambiado por culpa de personas.
Y digo por culpa porque he cambiado a peor.
Me he vuelto una cagada y no tengo cojones de decir lo que pienso, o lo que quiero por miedo a lo que piensen o lo que digan.
También estoy falta de confianza.
Me han jodido tanto en tan solo unos meses que no confío en nadie.
Tampoco me creo cualquier cosa que me digan, y menos los te quiero. Necesito pruebas para creer.

Voy en camino de ser una gran hija de puta por culpa de la sociedad.
Tengo una playa desierta en mi propia cabeza donde me asomo todas las noches y le grito al mundo que qué coño quiere, qué hago mal, por qué a mi.

Y nunca me contesta.

Y me comerán los gusanos.

Me siento marginada de cojones.
Es un poco frustrante sentirte sola hasta con tu gente, pero bueno, es lo que pasa a esta edad.
No me apetece quedarme sola otra vez pero estoy viendo que va a volver a pasar.
''Sal, relaciónate'', me dicen. ¿Con quién si todos en este pueblo me odian y los que quiero están lejos?
En serio, me da pánico quedarme sola otra vez.
Creo que odio a la gente.
La gente me odia a mi y yo los odio a ellos.
Es un odio mutuo.
No sirvo para relacionarme.
Yo creo que mejor estar muerta, así no me preocupo de amigos ni pollas.
Luego dirán; ''pobre niña, con lo maja que era''.

Y me comerán los gusanos.